27 de octubre del 2019

CONSEJO DIVINO.

LA PROFECÍA DE JEREMÍAS  

CAPITULO XL

DEL LIBRO DE DIOS "LA PROFECÍA DE JEREMÍAS CAP. XL– 40"

Jeremias, puesto en plena libertad, va a verse con Godolias prefecto de Judea. No cree este a Johanan que le avisa una traición que se urdia.

                                                                                                                        

Palabra o profecía que el Señor manifestó a Jeremías, después que Naburzardan general del ejército le envió libre desde Rama, cuando le llevaba atado a la cadena, confundido en medio de los demás que transmigraban de Jerusalem y de Judá, y eran conducidos cautivos a Babylonia.

Es de advertir que el general del ejército, tomando a Jeremías, luego que lo conoció, le dijo: El Señor Dios tuyo había predicho estas calamidades sobre tu país. Y el Señor las ha puesto en ejecución, y ha cumplido lo que ha dicho: porque vosotros pecasteis contra el Señor, y no escuchasteis su voz; por lo cual ha sucedido eso. Ahora bien, yo te he quitado hoy las cadenas que tenías en tus manos; si te place venir conmigo aBabylonia, vente; que yo miraré por ti: más si no quieres venirte conmigo a Babylonia, quédate aquí; ahí tienes a tu vista todo el país; a donde escogieres, y más te agradaré, allí puedes irte. No vengas pues conmigo, si no quieres: quédate en compañía de Godolias, hijo de Ahicam, hijo de Saphan, a quien el rey del Babylonia ha puesto por gobernador de las ciudades de Judá: habita pues con él en medio de tu pueblo, o vete donde mejor te parezca. Dióle también el general del ejército comestibles y algunos regalitos y le despidió. En consecuencia Jeremís se fue a casa de Godolias, hijo de Ahicam en Masphath, y habito con él en medio del pueblo que había quedado en el país.

Y habiendo sabido todos los capitanes del ejército de los Judíos (desparramados por varias partes ellos, y sus camaradas) que el rey de Babylonia había nombrado gobernador del país a Godolias, hijo de Ahicam, y que le habían recomendado los hombres y las mujeres, y los niños, y los pobres del país, que no habían sido transportados a Babylonia; fueron a encontrar a Godolias, y Johanan, y Jonathán, hijo de Caree, y Sareas, hijo de Thanehumeth, y los hijo de Ophi, naturales de Netophathi, y Jezonias hijo de Maachathi, ellos y sus gentes. Y godolias, hijo de Ahicam, hijo de Saphan, les aseguro con juramento a ellos y a sus compañeros, diciendo: No temáis obedecer a los Chaldeos: habitad en el país, y servid al rey de Babylonia, y lo pasareis bien. Ya veis, yo habito en Masphath para ejecutar las órdenes que nosviene de los Chaldeos. Y así vosotros recoged la vendimia, las mieses, y el aceite, y metedle en vuestras tinajas, y permaneced en las ciudades vuestras que habéis ocupado. Asimismo todos los Judíos que estaban en Moab, y entre los hijos de Amon, y en la Idumea, y en los demás países, que oyeron que el rey de Babylonia, había dejado alguna parte del pueblo en la Judéa, y nombrado gobernador del país a Godolias, hijo de Ahicam, hijo de Saphan; todos aquellos judíos, digo, regresaron de los países donde se habían refugiado, y vinieron a la tierra de Judá a encontrar a Godolias en Masphath, y recogieron la vendimia, y una cosecha grandísima de otros frutos.

Por este tiempo Johanan, hijo de Caree, y todos los capitanes del ejército que habían estado esparcidos en varias tierras, fueron a encontrar a Godolias en Masphath, y le dijeron: has de saber que Baalis, rey de los Ammonitas, ha despachado a Ismahel, hijo de Nathanias, para que te quite la vida. Más Godolias, hijo de Ahicam, no les dio crédito. Entonces Johanan, hijo de Caree, hablando aparte a Godolias, en Masphath, le dijo: yo iré y mataré a Ismahel, hijo de Nathanias, sin que nadie lo sepa, para que no te mate a ti, y no sean desparramados todos los Judíos que se han acogido a ti, y venga a parecer el resto del pueblo de Judá. Pero Godolias, hijo de Ahicam, contestó a Johanan, hijo de Caree: No hagas tal cosa; porque lo que tú dices de Ismahel es una falsedad.

El señor vuelve con su palabra que tiene poder e infinita sabiduría. Leed tranquila y concienzudamente y hallaras en cada frase, en cada palabra una enseñanza del libro del Señor. Medítalas y   aplícalas en tu vida, en tu familia y sobre todo, compártelas con tus estudiantes. Cada día el Señor te da una enseñanza y una palabra para reflexionar. El camino de la perfección requiere de mejor y mayor esfuerzo. Y tú estás en ese CAMINO. ¿Por qué Quieres huir de la perfección que Dios te ofrece?

FELIZ SEMANA                                                                   

JJ = J²