domingo, 28 de febrero de 2016


28 DE FEBRERO DEL 2016
CONSEJO DIVINO.
TOMADO DEL LIBRO DEL ECLESIÁSTICO

CAPITULO  III

DEL LIBRO DE DIOS "LIBRO DEL ECLESIÁSTICO  CAP. III – 3/"


De la honra debida a los padres: alábese la modestia y mansedumbre: repréndase la curiosidad en la inteligencia de los divinos misterios: se nos recomienda la misericordia y compasión para con el prójimo.

Los hijos o discípulos de la sabiduría forman la congregación de los justos; y la estirpe o índole de ellos, no es otra cosa que obediencia y amor. Escuchad, hijos, los preceptos de vuestro padre, y hacedlo así si queréis salvaros. Porque dios quiso que el padre sea honrado de los hijos, y vindica y confirma la autoridad de la madre sobre ellos. Quien ama a Dios alcanzará el perdón de los pecados, y se abstendrá de ellos; y se abstendrá de ellos; y será oído siempre que le ruegue. Como quien acumula tesoros, así es el que tributa honor a su madre. Quien honra a su padre, tendrá consuelo en sus hijos, y al tiempo de su oración será oído. El que honra a su padre vivirá larga vida; y da consuelo a la madre quien al padre obedece. Quien teme al señor, honra a los padres; y sirve como a sus señores, a los que le dieron el ser. Obra a tu padre con obras y con palabras y con toda paciencia, para que venga sobre ti tu bendición. La cual te acompañe hasta el fin. La bendición del padre afirma las casas de los hijos, pero la maldición de la madre las arruina hasta los cimientos. No te alabes de aquello que es la afrenta de tu padre, porque no es gloria tuya su ignominia;  puesto que de la buena reputación del hombre resulta gloria al hombre, y es desdoro del hijo un padre sin honra. Hijo, alivia la vejez de tu padre, y no le des pesadumbre en su vida; y si llegare a volverse como un niño, compadécele, y jamás le desprecies por tener tú más vigor que él; porque la beneficencia o caridad con el padre no quedará en olvido. Por sobre llevar los defectos de la madre en su decrepitud recibirás tu recompensa. Así la justicia será el fundamento de tu casa o edificio; y en el día de la tribulación habrá quien se acuerde de ti: y como en un día sereno se deshace el hielo, así se disolverán tus pecados, ¡Oh cuán infame es el que a su padre desampara! ¡Y cómo es maldito de Dios aquel que exaspera a su madre

Hijo, haz tus cosas con mansedumbre, y sobre ser alabado, serás amado de los hombres. Cuanto fueres más grande, tanto más debes humillarte en todas las cosas, y hallarás gracia en el acatamiento de Dios. Porque Dios es solo grande en poder, y él es horado de los humildes. No te metas en inquirir lo que es sobre tu capacidad, ni en escudriñar aquellas cosas que excedan tus fuerzas; sino que piensa siempre en lo que te tiene mandado Dios, y no seas curioso escudriñador de sus muchas obras. Porque no te es necesario el ver por tus ojos los ocultos arcanos de Dios. No quieras escudriñar con ansias las cosas superfluas, ni indagar curiosamente las muchas obras de Dios. Porque muchas cosas se te han enseñado que sobrepujan la humana inteligencia. A muchos sedujo la falsa opinión que formaron de ella, y sus conjeturas sobre dichas cosas lo han tenido en el erro. El corazón duro lo pasará mal al fin de la vida; y quien ama el peligro perecerá en él. El corazón que sigue dos caminos no tendrá buen suceso, y el hombre de corazón depravado hallará en ellos su ruina. El corazón perverso u obstinado se irá cargando de dolores; y el pecador añadirá pecados a pecados. La ruina de los soberbios es incorregible; porque la planta del pecado se arraigara en ellos, sin que lo adviertan. El corazón del sabio se deja conocer en la adquisición de la sabiduría, y el oído bien dispuesto escuchará a esta con sumo anhelo. El hombre de corazón sabio y prudente se guardará de pecar; y por las obras buenas será prosperado.

El agua apaga el fuego ardiente, y la limosna resiste o expía los pecados. Y Dios es el proveedor y remunerador del que hace bien al prójimo, y se acuerda de él. Para lo venidero; y al tiempo de su caída hallará apoyo.
.

El señor vuelve con su palabra que tiene poder e infinita sabiduría. Leed tranquila y concienzudamente y hallaras en cada frase, en cada palabra una enseñanza del libro del Señor. Medítalas y   aplícalas en tu vida, en tu familia y sobre todo, compártelas con tus estudiantes. Cada día el Señor te da una enseñanza y una palabra para reflexionar. El camino de la perfección requiere de mejor y mayor esfuerzo. Y tú estás en este CAMINO. ¿Por qué Quieres huir de la perfección que Dios te ofrece?

FELIZ SEMANA

JJ = J2


No hay comentarios:

Publicar un comentario