09 DE JULIO  DEL 2017

CONSEJO DIVINO.

LA  PROFECÍA DE ISAÍAS

CAPITULO  X

DEL LIBRO DE DIOS "LA PROFECÍA DE ISAÍAS  CAP. X– 10"

¡Desdichados aquellos que hacen leyes injustas, y oprimen al pobre, y a la viuda! Isaías predice la humillación de  Sennacherib;  y consuela a Israel, y le promete que los restos de este pueblo al fin se convertirán.

¡Ay de aquellos que establecen leyes inicuas, y escriben continuamente sentencias de injusticia, para oprimir a los pobres en juicio, y hace violencia a los desvalidos de  mi pueblo, para devorar cual presa a las viudas, y saquear a los huérfanos! ¿Qué haréis en el día en que os se tomará residencia, y en la calamidad que viene amenazando desde lejos?¿A quién acudiréis para que os ayude? ¿Y en donde dejareis o de qué servirá vuestra grandeza, para no doblegar la cerviz a la cadena entre los esclavos, no caer entre los muertos? A pesar de todas estas cosas, no está calmada la ira del Señor, sino aún esta levantado su brazo.

¡Ay de Assur! Vara y bastón de mi furor: en su mano he puesto mi ira. Enviarle he, contra un pueblo fementido, y contra un pueblo que ha provocado mi indignación; y daréle mis órdenes para que se lleve sus despojos, y le entregue al saqueo, y le reduzca a ser pisado como el lodo de las plazas. Es verdad que él no lo pensará así, y que en su corazón no  formará tal concepto: su corazón solo pondrá la mira en destruir y exterminar no pocas naciones. Porque dirá: ¿Acaso mis palaciegos no son otros tantos reyes? ¿Pues que no ha atenido la misma suerte Cálano que Charcamis?¿Y Emath que Arpad?¿Por ventura no ha sido de Samaria lo que de Damasco? Así como ganó mi mano los reinos de varios ídolos, del mismo modo venceré los simulacros de los de Jerusalén y de Samaria. ¿Acaso lo que hice ya con Samaria y con sus ídolos, no lo ejecutaré también con Jerusalén y con sus simulacros?  

Pero luego que el Señor hubiere cumplido todas sus obras en el monte de Sion, y en Jerusalem, él mismo tomará residencia de las empresas del altivo corazón del rey de Assyrio, y la jactancia de sus altivos ojos, ya que he dicho: con el poder de mi mano hice lo que hice, y con mi sabiduría lo tracé: y he mudado los límites de los pueblos, y despojado sus príncipes, y con el poder que tengo he derribado a los que estaban en altos puestos: Y el poderío de los pueblos  fue respecto de mi valor como una nidada de pajarillos; y como recogen del nido los huevo que han sido abandonados, así reuní yo bajo mi poder toda la tierra, y no hubo quien moviese una ala, ni abriese el pico ni piase. ¿pero y por ventura se gloriará la segur contra el que corta con ella, o se ensoberbecerá la sierra contra el que la mueve? Eso es como si se levantase la vara contra el que la maneja, o se envaneciese el bastón, que al cabo no es más que un palo.  

Por eso el soberano señor de los ejércitos, enviará la extenuación a sus robustos guerreros, y arderá debajo de sus galas una como hoguera de fuego que los consuma. Y la luz de Israel será el fuego, y su santo la llama con que se encenderán y arderán las espinas y las zarzas de Assur en un solo día. Y la gloria de este bosque y de este Carmelo, será consumida en cuerpo y alma, y él (Sennacherib) huira azorado. Y los árboles que de esta quedaren, se podrán contar por su corto número, y un niño podrá formar la lista de ellos.

Y entonces será cuando los que quedaren de Israel, y los de la casa de Jacob que habrán escapado, no volverán a fiarse en el que los hiere, sino que sinceramente se apoyarán en el Señor, el Santo de Israel.  Los residuos de Jacob, los residuos digo, se convertirán al Dios fuerte. Porque aun cuando tu pueblo, oh Israel, fuese como la arena del mar, solamente los restos de él se convertirán: pero los restos que se salvaren de la destrucción, rebosaran en justicia. Porque destrucción y disminución hará el Señor Dios de los ejércitos a toda la tierra de Judea.

Por tanto, esto dice el Señor Dios de los ejércitos: pueblo mío que habitas en Sion no tengas miedo del Assyrio: él te sacudirá con la vara, y alzará contra ti el bastón desde el camino que va a Egypto. Pero dentro de poco, muy en breve, mi enojo y mi furor provocado por sus maldades, llegará a su colmo.  Y el Señor Dios de los ejércitos levantará contra el Assyrio su brazo, y hará en él los estragos que hizo en los Madianitas en la peña de Oreb; y así como alzo su vara sobre el mar rojo, del mismo modo la alzará sobre el camino de Egypto. Y en aquel día será quitado de encima de tus hombros el peso de Assur, y su yugo de tu cerviz, y pudriráse el yugo por la abundancia del aceite. Llegará el rey de los Assyrios hasta Aiath, psara a Magron, en Machmas depositará su bagaje. Pasará a marchas forzadas, diciendo: en Gabaath plantaremos nuestros reales: Rama esta sobresaltada, Gabaath la de Saúl huye precipitadamente. Esfuerza tu grito, oh ciudad de Gallim; miro por ti, oh Laisa; y tú también pobrecita Anathot. Los de Medemena escaparon: esforzaos moradores de Gabbim. Aún falta un día para llegar a hacer alto en Nobe. Desde ahí levantará Sennacherib su mano en ademan de amenaza contra el monte de la hija de Sion, contra el collado de Jerusalem. Pero he aquí que el soberano Señor de los Ejércitos estrellará con ímpetu el vaso de la tierra; y los de agigantada estatura serán desjarretados, y los sublimes serán abatidos.  Y la espesura del bosque será cortada con el hierro, y caerá el Líbano con sus altos cedros.

El señor vuelve con su palabra que tiene poder e infinita sabiduría. Leed tranquila y concienzudamente y hallaras en cada frase, en cada palabra una enseñanza del libro del Señor. Medítalas y   aplícalas en tu vida, en tu familia y sobre todo, compártelas con tus estudiantes. Cada día el Señor te da una enseñanza y una palabra para reflexionar. El camino de la perfección requiere de mejor y mayor esfuerzo. Y tú estás en este CAMINO. ¿Por qué Quieres huir de la perfección que Dios te ofrece?

FELIZ SEMANA                                                                  

JJ = J²