17 DE Abril DEL 2016

CONSEJO DIVINO.

TOMADO DEL LIBRO DEL ECLESIÁSTICO

CAPITULO  IX

DEL LIBRO DE DIOS "LIBRO DEL ECLESIÁSTICO  CAP. IX – 9"

De la cautela en el trato de las mujeres, y con los grandes: conversar con los sabios tener siempre presente a Dios.

No seas celoso de tu querida esposa, para que no se valga contra tí de las malas ideas que tú le sugieres. No dejes que la mujer tenga dominio sobre tu espíritu; para que no se levante contra tu autoridad y quedes avergonzado. No pongas tus ojos en mujer que quiere a muchos, no sea que caigas en sus lazos. No frecuentes el trato con la bailarina, ni las escuches, si no quieres perecer a la fuerza de su atractivo. No pongas tus ojos en la doncella; para que la belleza no sea ocasión de tu ruina. De ningún modo des entrada en tu alma a las meretrices; para que no te pierdas tú y tu patrimonio. No andes derramando tu vista por las calles de la ciudad, ni vagueando de plaza en plaza. Aparta tus ojos de la mujer lujosamente ataviada, y no mires estudiosamente una hermosura ajena. Por la hermosura de la mujer muchos se han perdido: y por ella se enciende cual fuego la concupiscencia. Cualquier mujer pública es pisoteada de todos, como el estiércol en el camino. Muchos embelesados de la belleza de la mujer ajena se hicieron réprobos; porque su conversación quema como fuego. Con la mujer de otro no estés jamás de asiento; ni en la mesa te arrimes a ella recostado sobre el codo. Ni la desafíes con brindis a quien de los dos bebe más vino; no sea que tu corazón se incline hacia ella y acosta de tu vida caigas en la perdición.

No dejes el amigo antiguo; porque no será como él el nuevo. El amigo nuevo es un vino nuevo; se hará añejo, y entonces le beberás con gusto. No envidies la gloria y la riqueza del pecador, pues no sabes tú cual ha de ser tu catástrofe. No te agraden las violencias que comenten los hombres injustos: tú sabes que jamás en toda su vida puede agradar el impío. Vive lejos de aquel que tiene potestad para hacerte morir, y no andarás asustado con el temor a la muerte. Que si alguna vez te acercas a él, guárdate de hacer ninguna cosa, por la cual te quite la vida. Sábete que conversas con la muerte; porque tú caminas en medio de lazos, y andas entre las armas de gente resentida.

 Procede con cuanta cautela puedas con las personas que trates y conversa con los sabios y prudentes.  Sean tus convidados los varones justos, y tú gloria consista en temer a Dios. El pensamiento de Dios este fijo en tu alma, y sea toda tu conversación de los preceptos del Altísimo. Las obras de los artífices son alabadas por su industria o labor de manos; y el príncipe del pueblo por la sabiduría de sus discursos, y la palabra de los ansíanos por su prudencia. Temible es en su ciudad el hombre deslenguado, y será aborrecido el temerario por sus palabras.  

El señor vuelve con su palabra que tiene poder e infinita sabiduría. Leed tranquila y concienzudamente y hallaras en cada frase, en cada palabra una enseñanza del libro del Señor. Medítalas y   aplícalas en tu vida, en tu familia y sobre todo, compártelas con tus estudiantes. Cada día el Señor te da una enseñanza y una palabra para reflexionar. El camino de la perfección requiere de mejor y mayor esfuerzo. Y tú estás en este CAMINO. ¿Por qué Quieres huir de la perfección que Dios te ofrece?

FELIZ SEMANA

JJ = J²