08 de  FEBRERO DEL 2014

CONSEJO DIVINO.

TOMADO DE PROVERBIOS

PARTE VI

DEL  LIBRO DE DIOS "PROVERBIOS  CAP. VII- 7"

Hijo(a) mío(a), guarda mis consejos, y deposita en tu corazón mis preceptos. Observa, hijo mío, mis mandamientos, y vivirás; y guarda  mi ley como las niñas de tus ojos. Póntela como sortija en tus dedos; escríbelas en las telas de tu corazón. Dí a la a la sabiduría: Tú ere mi hermana; y llama amiga tuya a la prudencia: Para que te defienda de la mujer o del hombre extraño(a) y de la ajena(o).

Pues estando yo observando en desde la ventana de mi casa, por detrás de las celosías, vi a unos incautos mancebos; y fije mis ojos en un joven sin seso, que pasaba por la plaza junto a la esquina, y se paseaba por cerca de la casa de aquella mala mujer, allá entre dos luces, después de anochecido, en medio de las tinieblas: Cuando he aquí que le sale al encuentro dicha mujer con atavíos de ramera, apercibida para cazar almas, habladora y callejera, incapaz de sosiego, cuyos pies no pueden parar en casa; y así se pone en acecho ya fuera de la ciudad, ya en las plazas, ya en las esquinas.

Esta mujer, pues, le echa sus brazos al incauto mozo, le besa, y con semblante descarado, requebrándole le dice: había hecho voto de ofrecer victimas pacificas por tu salud, cabalmente hoy le he cumplido: Por cuyo motivo he salido a tu encuentro, ansiosa de verte, y al fin te hallo. Tengo tendida mi cama sobre cordones, las he cubierto con colchas recamadas de Egipto, he rociado mi cuerpo y mi alcoba con mirrha, áloe y cinamomo. Ven, pues, empapémonos en  deleites, y gocemos de los amores tan deseados, hasta que amanezca. Porque es día de feria y mi marido se halla fuera de casa y ha ido a un viaje muy largo. Un talego de dinero llevó consigo piensa regresar a su casa para el día del plenilunio.

De este modo la mujer (o el hombre), a fuerza de requiebros le mete en la red y le arrastra a su casa con sus caricias, al punto la va siguiendo como buey que llevan al matadero, y cual cordero que va retozándose, y el(la) mentecato(a) no conoce que es conducido a una prisión hasta que la saeta le traspasa las entrañas. Como vuela el ave hacia las redes, así va él(ella), sin advertir que corre a perder la vida.

Ahora pues, hijo mío, escucha, y atiende bien a lo que te digo. No dejes arrastrar tu corazón de sus seducciones y atractivos, ni sigas seducido(a) sus caminos, porque son muchos los que ella(el) ha herido y derribado y han muerto en sus manos los varones más fuertes. Su casa es el camino del infierno, camino que remata en la muerte más funesta.

El señor siempre ha estado a mi lado y  me ha puesto pruebas difíciles en varias ocasiones y a través de toda mi vida,  para por medio de ellas enseñarme  y corregirme,  no importando lo dolorosa que estas a veces me resulten. Así que la recibiré humildemente su corrección y procurare que esta vez la lección quede aprendida.  Hoy mi alma esta ensombrecida y mi espíritu inquieto, así, que solo me queda aferrarme a mi señor.

                             JJ = J²