27  DE NOVIEMBRE  DEL 2016

CONSEJO DIVINO.

TOMADO DEL LIBRO DEL ECLESIÁSTICO

CAPITULO  XXXIX

DEL LIBRO DE DIOS "LIBRO DEL ECLESIÁSTICO  CAP. XXXIX – 39"

 Ocupaciones del sabio, y celebridad de su nombre. Alabanzas de la providencia divina: todo se convierte en bien para los buenos y mal para los malos.

El sabio indagará la sabiduría de todos los antiguos, y hará estudio en los profetas. Recogerá en su corazón las explicaciones de los varones ilustres, y penetrará asimismo las agudezas de las parábolas. Sacará el sentido oculto de los proverbios, y se ocupará en el estudio de las alegorías de los enigmas. Asistirá en medio de los magnates y se presentará delante del que gobierna. Pasará a países de naciones extrañas, para reconocer aquello que hay de bueno y de malo entre los hombres. Despertándose muy de mañana dirigirá su corazón al Señor que le creo, y  se pondrá en oración en la presencia del Altísimo.  Abrirá su boca para orar, y pedirás perdón de tus pecados. Que si aquel gran Señor quisiera le llenará del Espíritu de inteligencia. Y derramará sobre él como lluvia máxima de sabiduría; y en la oración dará gracias al Señor. Y pondrá en práctica sus consejos y documentos, y meditará sus ocultos juicios. Expondrá públicamente la doctrina que ha aprendido, y pondrá su gloria en la Ley del testamento del Señor. Celebraran muchos su sabiduría, la cual nunca jamás será olvidada. No perecerá su memoria, y su nombre será repetido de generación en generación. Las naciones pregonaran su sabiduría y la iglesia celebrará sus alabanzas. Mientras viva tendrá nombradía que mil otros: y en pasando a mejor vida, hallará en esto su provecho, o bienestar.

Yo seguiré todavía dando consejos, porque me siento poseído como de un sagrado entusiasmo. Una voz de la sabiduría dice: Escuchadme vosotros que sois prosapia de Dios, y  brotad como rosales plantados junto a la corriente de las aguas. Esparcid suaves olores, como en el Líbano el árbol del incienso. Floreced como azucenas: despedid fragancias, y echad graciosas ramas, y entonad canticos de alabanza, y bendecid al Señor en sus obras. Engrandeced su santo nombre, y alabadle con la voz de vuestros labios, y con canticos que articule vuestra lengua, y al son de las cítaras; y diréis así en loor suyo: Todas las obras del Señor son en extremo buenas.  Á una voz suya se contuvo el agua como si fuera una masa, y quedo como un deposito o aljibe a un solo dicho se su boca. Porque todo es favorable cundo él manda y la salud que el da es perfecta. Están a su vista las acciones de todos los hombres, y no hay cosa escondida a sus ojos. El alcanza a ver los siglos todos; y  no hay cosa que sea maravillosa para él. No hay que decir: ¿Qué viene a ser esto? ¿O para qué es esto otro? Porque todas las cosas servirán a su tiempo. Su bendición es como un rio que inunda.

Como el diluvio empapó en agua la tierra, así la ira del Señor será la suerte que tocará a las naciones que no han hecho caso de él. Así como el convirtió las aguas en una sequedad, y quedo enjuta la tierra, y abrió un camino como para que pasasen los de su pueblo: así los pecadores por un efecto de la ira del Señor hallaran allí su tropiezo. Los bienes fueron desde el principio creados para los buenos; pero para los malos igualmente los bienes y los males. Lo que principalmente se necesita o sirve para el uso de la vida humana, es agua, fuego, y hierro, sal, leche y harina del trigo, miel y racimos de uvas, aceite y vestido. Así como todas estas cosas son un bien para los buenos; así para los impíos y pecadores se convierte en mal.

Hay ciertos espíritus creados para ministros de la venganza divina, los cuales en su furor hacen sufrir continuamente sus castigos. En el tiempo de la consumación o fin de las cosas echaran el resto de sus fuerzas, y aplacarán la cólera de aquel Señor que los creo. El fuego, el pedrisco, el hambre, y la muerte, todas estas cosas se hicieron para castigo; como los dientes de las fieras, los escorpiones y las serpientes, y la espada vengadora que extermina a los impíos. Se regocijaran como en un banquete, en cumplir el mandamiento del Creador, y estarán aparejadas sobre la tierra para cuando fuere menester, y llegado el tiempo ejecutaran puntualmente cuanto se les ordene. Y así desde el principio estoy persuadido, y lo he meditado, y pensado y dejado por escrito. Es a saber, que todas las obras de Dios son buenas, y cada una de ellas a su tiempo hará su servicio. No hay para que decir: Esto es peor que aquello; pues se verá que todas las cosas serán aprobadas de todos a su tiempo. Y ahora con todo el corazón y a boca llena alabad todos a una, y bendecid el nombre de Dios.

El señor vuelve con su palabra que tiene poder e infinita sabiduría. Leed tranquila y concienzudamente y hallaras en cada frase, en cada palabra una enseñanza del libro del Señor. Medítalas y   aplícalas en tu vida, en tu familia y sobre todo, compártelas con tus estudiantes. Cada día el Señor te da una enseñanza y una palabra para reflexionar. El camino de la perfección requiere de mejor y mayor esfuerzo. Y tú estás en este CAMINO. ¿Por qué Quieres huir de la perfección que Dios te ofrece?

FELIZ SEMANA                                                                   

JJ = J²