22
DE FEBRERO DEL 2015
CONSEJO
DIVINO.
TOMADO DE
ECLESIASTÉS
PARTE I
DEL LIBRO DE DIOS "ECLESIASTÉS CAP. I - 1"
Vanidad de todas las cosas mundanas.
Ninguna cosa es nueva de todas cuantas pasan debajo del sol.
Palabras de Salomón, llamados el Ecclesiastés,
hijo de David, rey de Jerusalén.
Vanidad de vanidades, dijo el
Ecclesiastés; vanidad de vanidades, y
todo lo de acá bajo no es más que vanidad. ¿Qué saca el hombre de todo el
trabajo con que se afana sobre la tierra o debajo de la capa del sol?
Pasa una generación, y le sucede la
otra: más la tierra queda siempre estable. Así mismo nace el sol y se pone y vuelve a su lugar; y
de allí renaciendo, dirigiré su curso hacia el mediodía, y declina hacia el
norte: corre el viento soplando por toda la redondez de la tierra, y vuelve a
comenzar después sus giros. Todos los ríos entran en el mar y el mar no rebosa,
van los ríos a desaguar en el mar, lugar de donde salieron para volver a correr
de nuevo. Todas las cosas son difíciles, no pude el hombre comprenderlas ni
explicarlas con palabras. Nunca se harta de mirar ni el oído de oír cosas
nuevas. ¿Qué es lo que hasta aquí ha sido? Lo mismo que será. ¿Qué es lo que se
ha hecho? Lo mismo que se ha de hacer.
Nada es nuevo en este mundo, ni puede
nadie decir. He aquí una cosa nueva, porque ya existió en los siglos anteriores
antes de nosotros. No queda memoria de las cosas pasadas ni tampoco de las que
están por venir habrá memoria entre aquellos que vendrán después al último.
Yo el predicador fui constituido en
Israel rey en Jerusalén. Y propuse en mi corazón inquirir e investigar
curiosamente todas las cosas que existen debajo del sol. Esta ocupación penosísima ha dado Dios a los
hijos de los hombres. Para que trabajen en ella, yo he visto todo cuando se
hace debajo del sol y he hallado ser todo vanidad y aflicción de espíritu. Las
almas pervertidas con dificultad se corrigen y es infinito el número de los
necios. Hice también dentro de mí mismo esta reflexión. Yo he llegado a ser
grande o poderoso; y he aventajado en sabiduría a todos los que florecieron
antes de mí en Jerusalén. Mi espíritu ha contemplado muchas cosas sabiamente, o
con grande atención y he aprendido mucho. Aplicado e igualmente mi corazón al
conocimiento de la prudencia y de la doctrina, y de los errores y desaciertos.
Y más he visto que aun esto mismo era todo trabajo y aflicción de espíritu.
Puesto que la mucha sabiduría trae consigo muchas desazones; y quien acrecienta
el saber también acrecienta el trabajo.
Leed tranquila y
concienzudamente y hallaras en cada frase, en cada palabra una enseñanza del
libro del Señor. Medítalos y aplícalos en tu vida, en tu familia y
sobre todo compártelo con tus estudiantes. Cada día el Señor te da un reto
y una palabra para reflexionar.
FELIZ SEMANA
JJ = J2
No hay comentarios:
Publicar un comentario