ASÍ AFECTO LA INUNDACIÓN DEL DÍA 5 DE NOVIEMBRE A LA IERD. CACICAZGO.
A la IERD. CACICAZGO de Suesca,
siempre le ha tocado luchar sus propias batallas para mantenerse viva, libre e
independiente desde 1937 cuando comenzó a existir, la historia no miente, pero
todos los que han hecho parte de ella y los que aun permanecemos haremos honor
al legado del espíritu ancestral de los caciques para poner bien en alto el
nombre de nuestra IE. No lloramos ante la adversidad, no nos rendimos y
buscamos soluciones.
El día sábado 5 de noviembre a eso de las dos de la tarde, empezó
una lluvia torrencial que cubrió parte de la vereda de Tenería, Santa Rosa,
parte del pueblo de Suesca y en total la vereda de Cacicazgo; la tormenta fue
tan intensa, con truenos y rayos, que en menos de 40 minutos empezó a arrastrar
lodo, barro y escombros desde la parte alta hasta los caños de la vereda los
cuales en cuestión de minutos, rebasaron su nivel de desagüe desbordándose por
las pequeñas calles destapadas y entrándose a las casas, fincas, negocios y por
supuesto al colegio.
En pocos minutos el caos era total en la vereda, las personas
tenían que refugiarse y trataban de poner en lugar seguro sus equipos, estufas,
colchones, cajas, ropa y bienes, e intentar que el agua y el lodo no se les metiera
en las casas.
La terrible fuerza de la naturaleza y su poder destructivo
afortunadamente no duro más de 40 minutos, pero el agua enfurecida seguía bajando
e inundándonos toda la vereda, incluyendo nuestro colegio, de igual manera el
rio se desbordo y no se pueden imaginar el trancón monumental que se formó.
Las dos zanjas que colindan con dos de los costados del
colegio, superaron su cota de la capacidad superior y en su curso natural de
igualar todo, se metieron al colegio por donde encontraron, sifones, baños,
puertas, desagües, en fin. La vereda y nuestra institución quedaron niveladas
por agua lodo. Los salones de la parte delantera quedaron a 10 cm bajo el agua,
la corriente era tan fuerte que pasaba por encima del pequeño puente de entrada
de nuestro colegio; como es lógica dentro del colegio el agua alcanzo en pocos
minutos el nivel de la zanja y de la calle; y todos los salones de la parte delantera
incluyendo las oficinas de rectoría y secretaria quedaron bajo el torrente de
agua lodo.
Pero como luchadores que somos y que no nacimos para rendirnos
ni darnos vencidos ante ninguna adversidad, el día 6 de noviembre muy por la
mañana, el rector hizo la inspección ocular, y con ayuda de dos personas ajenas
a la institución, con la vigilante de turno y con tres niños de primaria y uno
de sexto, se dieron a la tarea de lavar y limpiar oficinas y salones.
Había salones que literalmente estaban bajo el agua, y los demás
sumergidos en una capa espesa y resbaladiza de lodo. Como la gente de la vereda
estaba cada quien ocupada en sus propias dificultades, se pido ayuda pero no
pudieron ayudarnos. Eso si un vecino le presto al rector una porra y puntero
para hacer pequeños boquetes en la entrada de los salones y dejar que el agua
saliera.
En total el día de ayer quedaron listos y limpios los salones
del frente, las oficinas y los corredores y en el día de hoy, el rector concertó
de forma especial l con las señoras que prestan el servicio de aseo, para que fueran
a revisar y terminar dos salones. Gracias a los que nos ayudaron, muchas
gracias, en verdad esa ayuda fue invaluable y oportuna.
No vamos a decir no que tuvimos perdidas, claro que sí. Perdimos
unos diez estabilizadores, creemos que la fotocopiadora fue afectada, muchas cajas
con libros y papelería que estaba en el piso, muchos trajes, tres computadores
que había sido reparado hace muy poco, pero en fin, sobrevivimos, y como dignos
hijos de caciques estamos listos para seguir dando la lucha.
Como dije al comienzo, nos enfrentamos una vez más a las
fuerzas de la naturaleza y estamos con la integridad intacta y estoy seguro que
con el trabajo conjunto y la voluntad de Dios pondremos a nuestra IE. Reluciente
y en el lugar que le corresponde.
No nacimos para seguir el curso normal de los
acontecimientos, nacimos para hacer historia y recuerden que: Lo que no nos
mata, nos vuelve más fuerte. Así que, firmes y dignos, y ante todo listos para
seguir adelante.
JJAP.
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